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WEST, Texas (Agencias).— Una explosión que siguió a un incendio en una planta de fertilizantes al sur de Dallas, y cerca de Waco, en Texas, causó anoche al menos dos rescatistas muertos y otras 100 personas heridas, informó D. L. Wilson, vocero del Departamento de Seguridad Pública de Texas. Sin embargo, al cierre de esta edición, George Smith, director del servicio médico de emergencia de West citado por la CNN, temía que el número de víctimas mortales fuera de entre 60 y 70.
Antes, ABC News había reportado 200 heridos, 40 de ellos de gravedad, y la destrucción de entre 75 y 100 casas, un asilo y una escuela, según una vocera del Departamento de Seguridad Pública de Texas.
Los bomberos trataban de apagar un incendio en la planta cuando ocurrió la explosión, dijo el alcalde pro tempore de West, Steve Vanek, quien se dirigía a ayudar cuando ocurrió la tragedia, indicó Waco Tribune-Herald. El diario añadió que oficiales locales dijeron que amoniaco y otros químicos en la planta contribuyeron a la explosión.
Las autoridades dijeron que dos mil personas fueron desalojadas de la zona. “Temo lo peor, pero rezo por lo mejor”, dijo Vanek.
Tras el estallido, a las 19:50 (locales), algunas personas quedaron atrapadas en una residencia de ancianos cerca de la planta. Bill Bohannan dijo al Waco Tribune-Herald que cuando vio que la planta estaba en llamas, dijo: “Esto va a explotar… Y les dije a mis padres que entraran al coche. Estaba junto a mi coche esperando a mis padres y (la planta) explotó. Nos golpeó contra el auto”, dijo.
Ambulancias, cuerpos de seguridad, helicópteros y otros vehículos de emergencia se desplazaron al lugar y evacuaron a los heridos a un campo de futbol.
El gobernador de Texas, Rick Perry, emitió una declaración diciendo que su oficina movilizó recursos del Estado para ayudar a las autoridades locales. A su vez, la Casa Blanca informó que el presidente Barack Obama estaba al tanto de la situación y que evaluaba enviar ayuda federal.
